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A unos pasos del Parlamento de Ottawa, Capital Federal de Canadá, Lower Town es un barrio entero consumido por las drogas.
Y en particular por el fentanilo. Originalmente disponible con receta médica para tratar el cáncer, es un analgésico hasta 50 veces más potente que la heroína, según la DEA, que ahora se produce masivamente para el mercado ilegal.
Según el Ministerio de Salud, la crisis de opiáceos ha matado a casi 39,000 personas desde 2016. Esto es más que todas las muertes accidentales combinadas en Canadá.
Increíblemente para los dealers locales, el hecho que el fentanilo mate personas es un argumento de venta que resulta atractivo para otros consumidores.
Las sobredosis y las hospitalizaciones de emergencia se han disparado en todo Canadá. Este reporte de FRANCE 24 en español da cuenta de esta terrible historia con diferentes testimonios sobre lo que está sucediendo en las calles donde incluso las cifras de violencia y criminalidad han aumentado.
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